lunes, 3 de febrero de 2014
Mis autodestrucciones son cortas pero intensas, es como ahogarse dentro de ti misma, como si tus pulmones se hubiesen cerrado y no dejasen entrar, ni salir el aire, mientras un gran dolor agudo ataca tu corazón, que antes de cerciorarte de que sigue latiendo creerás que se ha partido en dos. Es un dolor inhumano, casi insoportable. Notarás como tu estómago se encoje, y como se hará un nudo, la garganta se te secará, te escocerá. Sin embargo mientras todo eso pasa dentro de mi, por fuera estaré sonriendo o seria. Y te responderé con un "No es nada " Mientras por dentro me esté muriendo. A los diez o veinte minutos volveré a respirar normal, volveré a ser persona, y notaré como poco a poco mi organismo vuelve a la normalidad, pero mientras mi cuerpo de autodestruya , déjame sola. Porque nada ni nadie puede parar ese proceso.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario